Consejos para mejorar tus fotos durante un viaje
0| Actualizado el 29 enero 2020
Texto y fotos por Alberto Loyo del blog Noradoa
Si tienes un viaje en mente y has decidido que sacarás unas fotos que quiten el hipo a tus amigos cuando se las enseñes, estás de enhorabuena porque te vamos a explicar cómo hacer buenas fotos.
Empecemos por el principio, ¿qué diferencia una foto de una buena foto? Una buena foto es aquella que transmite emociones, por lo tanto, si queremos hacer buenas fotos tenemos que incrementar las emociones que transmiten.
Aunque existan unas normas de composición y de colores (que luego explicaremos) que hacen que nuestras fotos sean más atractivas, la belleza de las cosas en general, y de las fotos en particular, es muy subjetiva, por lo que cada persona tendrá como buena foto, una diferente (es importante tenerlo en cuenta a la hora de mostrar nuestras fotos, personalmente no enseño las mismas fotos a mi madre que a mis amigos, por ejemplo).
Primeros pasos
El primer error que solemos cometer es pensar que por el hecho de ir a un lugar espectacular, nuestras fotos van a ser impresionantes. Sin duda, un lugar espectacular ayuda a hacer buenas fotos, pero hay que diferenciar entre foto y lugar espectacular.
Antes de empezar un viaje, mi primer consejo es que debes conocer cómo funciona tu cámara, y practicar con las opciones que tiene.
Ya sea cámara de un móvil o una más profesional, todas tienen bastante más que el botón de disparo. Está genial que la cámara saque en automático unas fotos extraordinarias, pero la combinación fotógrafo+cámara siempre va a hacer las fotos sean mejores. Con eso no quiero decir que tengas que hacer todas las fotos en manual, pero las cámaras suelen tener modos pre-programados (deporte, noche, retrato) o semi-automáticos (prioridad a la velocidad o a la apertura) que te ayudarán a dar un plus a tus fotos, transmitiendo lo que deseas en cada foto (no debemos permitir que sea solo la cámara quién decida las emociones que queremos transmitir).
Parámetros básicos en fotografía
Los tres parámetros fundamentales son el tiempo de exposición, la apertura del diafragma y el ISO.
- Obturación: es el tiempo que el obturador deja pasar luz al sensor. También es nombrado como velocidad de disparo o tiempo de exposición. Si abrimos poco tiempo el obturador, congelaremos la imagen, mientras que teniéndolo mucho tiempo abierto, conseguiremos fotografiar el movimiento de los objetos.
- Apertura: indica el tamaño del orificio central del diafragma que deja pasar la luz. Teniendo el diafragma muy abierto conseguiremos que entre más luz, pero tendremos menos profundidad de campo, con unos fondos más desenfocados.
- ISO: es la sensibilidad que tendrá el sensor. A un mayor ISO, el sensor captará más luz, pero a la vez, se generará ruido en la foto. Es muy importante saber cuál es ISO mayor de tu cámara, hasta dónde la foto no tiene ese ruido molesto.
A estos 3 parámetros, se les puede añadir el balance de blancos, que indica lo cálida (tonos pastel) o fría (tonos azulados) que va a ser la foto.
No existen unos valores para estos parámetros que hagan buenas fotos, depende bastante de la cámara que tengas y, sobre todo, del tipo de foto que quieras hacer. Normalmente los objetivos suelen tener un valor de apertura (punto dulce) donde dan más nitidez.
Elementos en una fotografía
Una fotografía se divide en primer plano, plano medio y fondo. Si es posible, debemos que añadir elementos en cada uno de esos planos.
Debemos prestar atención a la ubicación de los elementos principales de nuestra imagen. La regla de los tercios o la proporción áurea son ejemplos de reglas de composición que nos ayudarán a hacer más atractivas nuestras fotos.
Normalmente las fotos se leen de izquierda a derecha y de arriba a abajo, así que el uso de líneas nos ayudan a leer las fotos.
El color también es un elemento principal en una foto, y normalmente los colores cálidos suelen atraer más que los fríos. También debemos considerar que hay combinaciones de colores que son más atractivos, por ejemplo, los complementarios o los análogos (importante para seleccionar el vestuario de las modelos, por ejemplo).
Una vez que tenemos claro la teoría, vamos a la práctica, cámara en mano.
Primera foto
¿Qué piensas cuando ves la foto? La foto está sacada en el arco Mesa del parque nacional Canyonlands en Utah y mi primera impresión es que un lugar bonito, a donde me gustaría viajar, pero no veo ningún elemento dentro de la foto que me haga pensar que es una buena fotografía.
Suele ser el tipo de fotos que hacemos, pero en mi opinión, no debes conformarte solo con un lugar bonito.
En este caso, aproveché las horas centrales del día para localizar el arco (saber a qué distancia del camino estaba, cómo era el camino…) y de paso saqué la foto comprobando que lente iba a necesitar para hacer la “foto bonita”.
Segunda foto
En esta segunda foto hemos añadido valor a este arco aportando el cuándo, no solo hemos fotografiado un lugar espectacular, sino que lo hemos hecho cuando el sol lo ilumina.
Hacer esta segunda foto no es fruto de la casualidad e implica una planificación y el esfuerzo de madrugar, por lo que la hace un poco más difícil.
Consejos y aplicaciones que utilizamos los fotógrafos de naturaleza
Si quieres encontrar las mejores localizaciones, recomiendo 500px (tanto web como app).
Suelo usar las apps PhotoPills y Planit Pro (aplicaciones de pago) para ver por dónde sale y se oculta el sol, fases de la luna, etc…
Windy (gratis) es mi app favorita para comprobar la previsión del tiempo.
Aunque las primeras y últimas horas del día dan una atmósfera a las fotos que las hacen especiales, los momentos de luz se pueden dar en cualquier momento (rayos de luz que atraviesan las nubes, nubes tormentosas).
Si os fijáis en la foto, no está sacada al amanecer, pero sí se dan unas condiciones especiales, porque la luz rebota en la roca e ilumina el arco.
Una vez que hemos hecho la foto típica, una de las cosas que nos hará mejorar como fotógrafo es intentar hacer algo diferente a lo que hemos visto. Podemos hacer buenas fotos fotografiando detalles, fotos al nivel del suelo, cualquier cosa que nos resulte atractiva, al final, la cámara es un juguete y por qué no jugar a hacer fotos diferentes.
Por último, recomiendo no obsesionarse buscando las mejores localizaciones para esas horas de luz mágicas, el objetivo de la mayoría de nuestros viajes es disfrutar de los mismos, relajarnos y disfrutar de lugares y situaciones que posiblemente no volvamos a repetir.
Tercera foto
Los elementos humanos en una fotografía siempre añaden un plus (punto de interés, referencia para cálculo de tamaños). Resulta muy interesante integrar la persona en el paisaje. En esta foto, la chica (una turista a la que no conocía de nada) me llamó la atención por su poncho con detalles indígenas y por la postura mirando al sol.
Comprar un sombrero vaquero en el Oeste de los USA o un turbante en el desierto no cuesta nada y, además de dar un gran servicio contra el sol, pueden añadir un gran plus a nuestras fotos.
En esta foto, lo importante es el paisaje y la chica añade el plus. También podemos hacer lo contrario, que lo importante sean los modelos y el paisaje simplemente sea el relleno. En este último caso, suele ser muy interesante que el fondo salga ligeramente desenfocado.
Las mejores horas para sacar fotos de retrato son atardecer o amanecer donde las sombras y las luces son menos duras (recuerda que el flash puede suavizar las luces).
¿Qué material recomiendo llevar en un viaje normal?
Mi consejo es intentar equilibrar entre el peso que llevas y una buena cámara con sus accesorios.
Yo no soy un ejemplo a seguir, ya que normalmente viajo con dos cámaras (Nikon d610) y tres objetivos (un 15-30 de Tamron, un 24-70 de Nikon y un 28-300 de Nikon o el 70-200 de Tamron), además de varios filtros ND (densidad neutra) y un trípode.
Personalmente recomendaría llevar una cámara con un objetivo polivalente equivalente a un 24-120, y metería también en la maleta un trípode (no es necesario que sea grande).
¿Recomiendo el post-procesado de las fotos?
Mi respuesta es muy clara, TOTALMENTE. Las cámaras tienen ciertas limitaciones que con un post-procesado se pueden solucionar. Personalmente uso Lightroom en el ordenador (programa de pago).
Desde el teléfono móvil, se pueden usar aplicaciones como Snapseed o el mismo Lightroom. Y si no quieres complicarte la vida, siempre está Instagram y sus filtros.
Si vamos a procesar las fotos después, una recomendación es sacar las fotos en formato RAW (el nativo de cada cámara) y no en JPG.
Y para acabar el artículo, tres consejos:
- Hacer una buena foto normalmente cuesta tiempo y en los viajes solemos ir acompañados, piensa tanto en tus acompañantes como en la foto que quieres sacar.
- Aunque parezca sencillo, hacer buenas fotos en los viajes es muy complicado, muchas veces los elementos que nos rodean no acompañan, así que es importante no frustrarse por no conseguir un fotón.
- Cuando vayas a enseñar tus fotos, haz una pequeña selección de las mejores, solemos tender a enseñar demasiadas y eso puede provocar aburrimiento.
Por cierto, ¿cuál de las tres fotos puestas como ejemplo es tu favorita?
Si quieres seguir los viajes de Alberto, puedes hacerlo a través de su cuenta de Instagram
1 comentario