La vuelta al mundo en Francia
1| Actualizado el 14 julio 2020
Seguramente muchos de vosotros soñáis con ver esos enormes templos budistas o los interminables lagos canadienses, pero a veces no se tiene ni el tiempo ni los medios. Sin embargo, no hace falta irse tan lejos para ver paisajes espectaculares. Os proponemos diez lugares que visitar en Francia para dar la vuelta al mundo sin salir del país vecino.
Irlanda
La costa de Alabastro
En Normandía, a orillas del Canal de la Mancha, se encuentra la costa de Alabastro. Sus impresionantes acantilados de roca blanca y su naturaleza salvaje nos recuerdan a las costas salvajes de Irlanda. Esta costa se extiende a lo largo de 130 kilómetros entre las localidades de Le Tréport y Le Havre, pasando por los pueblos costeros de Étretat, Fécamp o Dieppe. Claude Monet pinto allí algunas de sus obras maestras.
Camboya
El Palacio ideal de Drôme
Parece ser parte del templo de Angkor, en ubicado en Camboya. Nada más lejos de la realidad, este curioso edificio está en Hauterives, una pequeña localidad en la región de Ródano-Alpes. Otros de los lugares que debes visitar en Francia es el Palacio ideal. Se trata de una obra de Ferdinand Cheval, un cartero que dedicó su tiempo libre durante 30 años a construir este monumento de piedra roca sin la ayuda de planos ni maquetas.
Escocia
La Cadena de los Puys
La Cadena de los Puys, Patrimonio Mundial de la UNESCO en 2018, ofrece a lo largo de sus 35 km de extensión un espectacular paisaje compuesto de 80 volcanes alineados. Está situada al oeste de Clémont-Ferrant en la región de Auvernia. Esta cadena volcánica evoca los paisajes escoceses marcados por su actividad volcánica, como la colina situada en el corazón de Edimburgo, el Arthur’s Seat.
China
Chinagora en el Valle del Marne
Lo que podría ser una imagen de una ciudad cualquiera en China, no es más que un hotel situado a unos cuantos kilómetros de París. Huatian Chinagora está inspirado en la Ciudad Prohibida de Pekín y el Palacio Imperial Chino. Si te apetece vivir una experiencia oriental sin salir de Europa, este hotel está hecho para ti.
El Sáhara
Duna de Pilat
Sin duda, uno de los lugares imprescindibles que visitar en Francia es la duna de Pilat. Cuando llegues a la cima, pensarás que estás en pleno desierto del Sáhara. Sin embargo, se encuentra a tan solo 40 kilómetros de Burdeos. La de Pilat es la duna de arena más alta de Europa con más de 100 metros de altura, 3 kilómetros de largo y 60 millones de metros cúbicos de arena.
El Gran Cañon del Colorado
Rustrel
Para sacar esta foto no hace falta cruzar el charco. Aunque parezcan los terrenos rojizos tan característicos del Gran Cañón del Colorado, en realizada se trata de la población de Rastrel, en la región Provenza-Alpes-Costa Azul en el departamento de Vaucluse. El Colorado Provenzal se encuentra en unas antiguas canteras de ocre, de ahí sus tonos rojizos y anaranjados.
Japón
Parque Oriental de Maulévrier
Al principio del siglo XX se concibió este jardín oriental de Maulévrier, inspirado en los jardines japoneses. Este jardín alberga unas 300 especies de plantas, como los cerezos japoneses o las azaleas. Además, cada año se realizan multitud de animaciones florales y sesiones de meditación. Sin duda, un remanso de paz.
Canadá
Los lagos de los Vosgos
Inmensos lagos en los que se ve reflejados la frondosa vegetación de la montaña que los rodean. Así son los lagos de los Vosgos, al noreste de Francia parecen una postal sacada de Canadá. Los más conocidos son los de Gerardmer y Longemer. Además, en invierno está región es perfecta para esquiar
Isla de Pascua
El Valle de los Santos de Carnoët
En la bretaña francesa, se encuentra el Valle de los Santos de Carnoët, una ladera en la que se levantan un centenar de esculturas monumentales que rinden homenaje a la historia celta de la región. Cada estatua representa la imagen de un santo vinculado con las leyendas locales. Sus colinas llenas de estatuas nos recuerdas a los misteriosos morais de la Isla de Pascuas en Chile.
Lusiana
La Marisma Poitevin
Al sur de Luisiana se encuentra la región pantanosa del Bayou. Se trata de una zona especialmente húmeda y pantanosa en la que los canales serpentean a lo largo de la frondosa vegetación. Eso mismo es lo que podréis encontrar si visitáis el parque natural de la Marisma Poitevin en Nueva Aquitania, cerca de la Rochelle. La también conocida como la Venecia verde te ofrecerá agradables paseos en barca a través de sus paisajes bucólicos.
4 comentarios
Julia Del Olmo
15 julio 2019
Madre mía, ¡me he quedado sin habla! Quién lo hubiera dicho... Me lo apunto todo, que sitios más buenos!