6 lugares poco conocidos que ver en Brasil
0| Actualizado el 22 abril 2024
Texto e imágenes por Raquel y Tomás del blog Nunca sin viaje.
Lo sabemos: a la hora de organizar nuestras vacaciones por un país gigantesco, siempre acabamos dejando algo atrás. En nuestro intento por verlo todo, siempre buscamos lo más imprescindible de cada destino para llevarnos una idea lo más exacta posible del lugar.
Cuando la gente organiza un viaje con los lugares que ver Brasil, ocurre exactamente eso. Y, por norma general, los viajeros escogen los destinos más habituales y a los que siempre va todo el mundo: Río de Janeiro, Iguazú, Salvador de Bahía…
Que ojo, son lugares increíbles que a nosotros nos encantan y se merecen una visita. Pero Brasil tiene mil y un lugares menos conocidos: destinos turísticos que son muy famosos entre los locales y pasan inadvertidos para los visitantes extranjeros.
Como nosotros tenemos la suerte de viajar por Brasil como locales, vamos a aconsejaros seis destinos que ver en Brasil menos conocidos fuera de las rutas más trilladas:
Ilhabela
Uno de los destinos favoritos de los paulistanos que ver en Brasil es Ilhabela. Esta isla tiene un nombre que lo dice todo (significa “Isla Bonita” en español). El 94% de la isla es mata atlántica y tiene, además, enormes playas salvajes a las que solo se puede llegar en todoterreno, en barco o caminando durante horas por la selva.
La Playa de Castelhanos es la más famosa de la isla. Para visitarla, te aconsejamos que vayas en jeep y vuelvas en barco, para poder atravesar el Parque Estadual y recorrer la agreste costa exterior de la isla. La pista es tan angosta que, para evitar problemas, se establecen horarios para cada dirección.
Si lo que te apetece es hacer senderismo, Ilhabela cuenta con rutas por la selva que llevan a grandes cascadas, como la de Água Branca, o la Cachoeira do Gato.
Además, si vas en la época adecuada, podrás ver ballenas jorobadas, ya que pasan por aquí en su ruta desde el Antártico hasta Bahía.
Ouro Preto
Si lo que buscas es un destino cultural en el que aprender sobre la historia de Brasil, entonces Ouro Preto es tu lugar. Situada en el corazón de Minas Gerais, esta ciudad fue testigo de la fiebre del oro en el país: y es que en esta región se extrajeron toneladas y toneladas.
Ouro Preto es también una joya arquitectónica por la gran cantidad de muestras de arte barroco brasileño. Destacan los interiores recargados en dorado, así como las fachadas en piedra jabón, un material muy blando que permitía una gran complejidad en el diseño.
Otro de los imprescindibles que ver en esta ciudad de Brasil es visitar una de las muchas minas de oro ocultas bajo las calles. Son minas de galerías estrechas y angostas en las que se extraía el oro de forma manual y con métodos rudimentarios, por lo que es fácil imaginarse lo mal que lo pasaron los mineros.
Y si solamente te apetece callejear e ir descubriendo rincones, debes saber que la ciudad ofrece algunas de las panorámicas urbanas más bonitas de todo Brasil, con sus calles empinadas y sus casas blancas. Una auténtica maravilla.
Porto de Galinhas
No podíamos hablar de los lugares que ver en Brasil sin mencionar un destino típico de playa que es muy popular entre los brasileños: Porto de Galinhas. Este lugar es muy conocido por sus piscinas naturales que se forman en el arrecife. Cuando la marea está baja, se puede acceder a las piscinas en un tipo de barco tradicional llamado jangada y nadar con los miles de peces que habitan allí.
A poca distancia de Porto de Galinhas se encuentra la que es para nosotros una de las playas más bonitas de Brasil: Praia dos Carneiros. En la playa, sobre la arena blanca y rodeada de palmeras, se encuentra la capilla de São Benedito, un lugar muy popular para los que quieren casarse junto al mar.
Si visitas esta región, te recomendamos que reserves también algún día para conocer la ciudad de Recife y a la bonita Olinda, una ciudad colonial muy bien conservada.
Bonito
Otro nombre muy descriptivo que hace justicia al lugar. Bonito, situado en Mato Grosso do Sul, es el destino por excelencia para practicar ecoturismo en Brasil. Aquí puedes hacer casi cualquier actividad relacionada con la naturaleza: baños en cascadas, esnórquel, rápel, visita a nacientes de ríos, a grutas con lagos subterráneos… La oferta es muy amplia y sigue creciendo cada año.
Además, los ríos de Bonito pueden presumir de tener aguas tan transparentes que literalmente parece que estás flotando en el aire. Si no fuese por la cantidad de peces que te rodean, perderías la noción de dónde te encuentras.
Otro de los atractivos de Bonito es el hecho de que puedes encontrar animales casi en cualquier lugar, y sin buscarlos: armadillos, coatíes, osos hormigueros, pecaríes, guacamayos, monos… Solo tienes que ir con los ojos muy abiertos y, sobre todo de noche, circular con mucha precaución para evitar encontrarlos en la carretera.
Natal
Las playas de Natal son famosas por sus dunas y porque es posible recorrerlas de una forma original: en buggy. Suelen recogerte directamente en el hotel y el recorrido se realiza por kilómetros y kilómetros de arenales. El conductor, cuando te subas, te hará una pregunta: “¿Con emoción, o sin emoción?”. Si escoges la opción aventurera, el buggy serpenteará duna arriba y duna abajo, como si estuvieses en una montaña rusa frenética.
Te aconsejamos que, escojas la opción que escojas, agarres bien tu sombrero y dejes que el viento y el sol te acaricien la cara mientras recorres a toda velocidad estos paisajes de película.
Otro de los lugares imprescindibles en la zona es el pueblo de Pipa, donde podrás comer en la playa y descansar junto al mar. Con suerte, también verás algún delfín. Este lugar es tremendamente popular entre los brasileños y contrasta con la enorme Natal, por lo que es un buen lugar para alojarte si quieres escapar de la gran ciudad.
Lençóis Maranhenses
Aunque las palabras “desierto” y “agua” no suelen ir de la mano, en el estado de Maranhão combinan a la perfección. Aquí se encuentra un gigantesco desierto inundado que en la época de lluvias crea uno de los paisajes más fascinantes de Brasil (y del mundo).
La lluvia llena los espacios que se forman entre las dunas, creando lagunas de limpísimas aguas azules en las que es posible darse un chapuzón. El nombre de Lençóis, que literalmente significa “sábanas” hace referencia al efecto que generan las lagunas en medio de la arena, dándoles el aspecto de una sábana arrugada.
Una de las maneras más impresionantes de apreciar los Lençóis Maranhenses es desde el aire. Distintas empresas organizan vuelos en avioneta para poder ver el desierto inundado en todo su esplendor.
Eso sí: asegúrate de visitar los Lençóis después de la época de lluvias porque, de lo contrario, es posible que te encuentres las lagunas sin agua.
Podríamos seguir mencionando muchos destinos más que ver en Brasil: Capitólio, Jalapão, Chapada Diamantina… Brasil es un país inmenso y harían falta años para conocerlo a fondo. Pero, como seguramente no tendrás tanto tiempo para recorrerlo, con estos lugares que te hemos recomendado podrás hacerte una buena idea de las maravillas que esconde. ¿A qué esperas para visitarlo?
Seguro de viaje a Brasil
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